Así como los arquitectos dedican parte de su tiempo para hablar con sus clientes, esto para entender mejor sus deseos y necesidades, el diseño de tecnología también requiere de prestar atención a los que los futuros usuarios desean. A la escuela del diseño que contempla la colaboración activa de los stakeholders se le conoce como diseño participativo.
El diseño participativo consta de esfuerzos para formar una base de información (i.e., insights) para definir los objetivos y necesidades de los stakeholders respecto a un servicio o producto. En general, este contempla tareas como comprender el razonamiento detrás de diferentes posiciones/acciones, aclarar cómo se relacionan entre sí, y diseñar y presentar una solución que acomode a las necesidades y gustos de los stakeholders. Para lograr su meta, el diseño participativo hace uso de diferentes tipos de técnicas.
Algunas de las técnicas más usadas en el diseño participativo incluyen: (1) planificación, (2) revisión de materiales, (3) audiencias, (4) entrevistas, (5) análisis de documentos, (6) análisis funcional, (7) análisis FODA, (8) observación, (9) experimentos de pensamiento en voz alta, (10) talleres, (11) talleres conceptuales, (12) mapeo, (13) reflexión, (14) visitas de campo, (15) experimentación con prototipos y (16) desarrollo de escenarios (Bodker, Kensing, y Simonsen, 2004).
La participación activa de los usuarios en el diseño aumenta la posibilidad de que este refleje su realidad (ej. necesidades, situaciones, retos). Un usuario puede participar como informante, o bien como revisor de las propuestas hechas por el equipo de diseño. El equipo de diseño puede compilar insights de dos maneras: (1) mediante experiencias concretas, llevando a cabo actividades con los usuarios; y (2) mediante ideas y conceptos abstractos, expresados a través de descripciones y modelos.
El tipo de información que un usuario puede proveer a un equipo de diseño incluye el tipo de productos y servicios que utilizan, el por qué y cómo se realizan las tareas, los tipos problemas a los que se enfrentan, las estrategias que siguen para solucionar dichos problemas, los sistemas/dispositivos que utilizan, las relaciones que tienen con otros usuarios, etc.
Como resultado de las sesiones de diseño participativo suelen crearse escenarios, dibujos, mapas, diagramas, y prototipos (de bajo o alto nivel). Para conocer más al respecto, los invitamos a consultar el siguiente video.
Referencia
Bodker, K., Kensing, F., y Simonsen, J. (2004). Participatory IT Design - Designing for businesses and workplace realities. Cambridge, Massachusetts, USA: MIT Press. ISBN: 978-0262025683